Los acantilados de Moher representan uno de los atractivos turísticos más importantes en Irlanda, y por lo tanto uno de los obligados para los visitantes.
Esto debido a que desde allí se puede gozar de una vista privilegiada de los alrededores, especialmente del Atlántico.
Además, se puede disfrutar de una zona llena de historia medieval, con castillos que se han hecho un espacio propio en el panorama actual resistiendo al tiempo.
Existen numerosas excursiones que salen desde Dublín y visitan los puntos más importantes de la ruta, el mismo Moher y sus alrededores. Podrás hacer el recorrido ideal en un día.
¿Por qué visitar los acantilados de Moher?
En los acantilados de Moher puedes ver diferentes castillos, cuevas, la torre de O’Brien y una torre de forma circular de piedras que se encuentra a mitad de los acantilados.
Por lo que además de ser un lugar con un aire muy puro, y un ambiente lleno de naturaleza que puede ser tanto para enamorarse, como para pedir matrimonio, incluso en el mismo momento, también da una posición para divisar toda la zona a la distancia.
La altura de los acantilados es la ideal para admirar la zona, ya que tiene 120 metros de altura en el punto más bajo y 214 metros en el punto más alto. Éste, el más alto, es equiparable al punto medio del Empire State.
Por si eso fuera poco, allí mismo se puede disfrutar del Parque Nacional de Burren, donde conocerás la flora y la fauna que caracteriza Irlanda.
Sin duda es una de las mejores cosas que hacer si estás en Dublín.
¿Qué hacer en los acantilados de Dublín?
Los acantilados de Dublín son ideales para múltiples actividades al aire libre. Muchas personas acuden a ellos tan solo por la posibilidad de respirar un aire libre y fresco.
Evidentemente la primera actividad que pasa por nuestra cabeza al escuchar sobre acantilados es visitarlos para admirar la vista que desde allí se tiene a kilómetros de distancia. La torre que allí se encuentra es ideal para ello.
Visitar los acantilados para realizar caminatas es algo bastante recomendable, ya que las zonas propensas para ello. Son muy seguras y están llenas de fauna y flora que crea un ambiente inmejorable.
Informarnos en el centro de visitantes
El centro de visitantes de los acantilados de Moher se ubica en la entrada de los mismos y es muy recomendable entrar allí antes de seguir el camino.
Allí encontraremos la información necesaria para entender mejor los acantilados, la flora y la fauna que allí habita.
Igualmente, podremos informarnos sobre las rutas a tomar para llegar a los diferentes puntos de los acantilados, y las medidas de seguridad apropiadas.
Otra función importante del centro de visitantes, es que sirve muy bien de refugio en caso de lluvia, ya que es la única zona con techo en el área, y las lluvias no son nada comunes en esa zona sin importar la época del año.
Por todo esto deberás de tener muy claro dónde se ubica el centro de visitantes.
Mirador de la torre O’Brien
La torre de O’Brien es el resultado de un terrateniente de profesión abogado y a su vez representante de Clare en el Parlamento Británico.
Hablo de Cornelius O’Brien, quien decidió construir la torre con el fin de aprovechar de mejor manera la vista que brindaba los acantilados.
Su planificación fue tan buena que no solo se preocupó por hacerla eficaz en su uso como mirador, sino que se aseguró de hacerla lucir estéticamente.
Desde su mirador, la torre O’Brien brinda vistas únicas de las islas Aran y el Atlántico. Claro está que la neblina y días de lluvias hacen que la visión se limite enormemente, pero en un día claro es posible admirar todo en su mayor esplendor.
Pero el Atlántico no es lo único interesante por ver desde la torre, ya que si miras hacia el sur, podrás admirar Loop Head y su faro blanco. El cual desde 1991 opera cada día las 24 horas.
Mirar desde tal altura al mundo puede ser inspirador. Date permiso a soñar cualquier cosa desde allí. Seguro que saldrás del mirador de la torre O’Brien con mucho más que sólo una buena experiencia.
Senderismo por los acantilados
El senderismo en esta zona es una forma de excursión común entre los habitantes de Dublín, ya que es una forma de tener un acercamiento más real con la naturaleza.
Para los turistas es una actividad obligada si desean conocer de verdad la zona.
Los acantilados tienen una red de caminos que recorren su extensión, de aproximadamente 750 kilómetros. Toda la extensión está bordeada con piedras por la seguridad de los visitantes.
Cabe señalar que cuanto más alejado se esté del centro de visitantes, menos gente habrá caminando por allí. Igualmente, hay zonas en donde de tan alejadas se puede encontrar ganado pastando, lo que vuelve toda esta experiencia mucho más real.
Como medida de seguridad, a pesar de las piedras que limitan el camino y lo protegen, se debe de evitar acercarse demasiado ya que a veces el viento sopla muy fuerte y a tal altura podría incluso causar que cualquiera perdiera el equilibrio. Mucho cuidado con eso.
Disfrutar de su flora y fauna
La flora y fauna de Dublín tiene que ver con los tipos de paisajes naturales que se presenten en esta zona, los cuales se pueden definir como el paisaje costero y la estepa norpatagonica.
Con respecto al paisaje costero, tenemos las extensas playas, acantilados rocosos, caletas y bahías que son la principal atracción de los acantilados de Moher.
Es por tal motivo que se pueden encontrar especies únicas y que normalmente no se encuentran en otras regiones como el lobo marino de un pelo, orcas, elefantes marinos, toninas o ballenas.
Así mismo, se encuentran aves como loros barranqueros, gaviotas cangrejeras y de otros tipos, garzas mora, blancas y bueyeras, cisnes de cuello negro, patos capuchinos o incluso flamencos australes.
Excursiones típicas
Las formas de visitar los acantilados de Moher son muchas y muy variadas, por lo que lo conveniente es que valores cada una de ellas y elijas así la mejor para tu caso.
Cada una de ellas tiene sus ventajas y desventajas, pero cada persona tiene diferentes gustos.
Las excursiones más populares son:
- Visitar en barco los alrededores de los acantilados
- Hacer un recorrido en autobús por la zona antes de llegar a ellos
- Practicar senderismo con un guía experto en la zona.
Ahora te explicamos cada una de ellas:
Hacer los acantilados de Moher en barco
Visitar los acantilados a bordo de un ferry es algo que resulta completamente diferente a hacerlo caminando, ya que la perspectiva desde abajo hace que todo se convierta en un espectáculo impresionante que te hará emocionarte.
El recorrido dura alrededor de 30 minutos y se realiza en un ferry con el que visitarás Inisher y las Islas Aran, en donde incluso es posible divisar delfines nariz de botella.
Tras esto, la embarcación se dirigirá a los alrededores de los acantilados de Moher.
Punto de partida
El tour incluye la recogida directamente a cualquier hotel que se encuentre en Galway, por lo que si elijes hospedarte allí no tendrás de qué preocuparte. Solamente necesitas estar preparado con todo lo necesario cuando llegue el autobús por ti y tus acompañantes.
Si te encuentras en Dublín, lo mejor es tomar transporte público para llegar a Galway. No demora mucho el viaje y puedes tomarlo como parte del recorrido.
Otra opción es tomar los tours que salen desde Dublín, que comúnmente parten desde la calle O’Connell.
Salida
Debido a la popularidad del tour, se realizan salidas cada día siempre y cuando el tiempo lo permita, ya que hay temporadas en las que las lluvias hacen que no sea completamente seguro realizar el recorrido.
Debes de verificar que los días que pretendes visitar la zona sean los idóneos para ello.
Hora de salida
La hora de salida puede variar levemente dependiendo de la época del año, pero regularmente se realizan a las 10 de la mañana.
Aun así, la hora de recogida varía dependiendo de la ubicación del hotel. Información que te dan a la hora de reservar.
Detalles del regreso
El regreso puede variar dependiendo de la zona que se visite, ya que en caso de querer enlazar este tour con algún otro en Doolin o Inisheer, es posible, pero esto modificaría el traslado.
Todo es cuestión de aclararlo con los organizadores, pero en caso no hacer ningún cambio, el tour incluye transporte en autobús de regreso directamente al hotel siempre y cuando se encuentre en Galway.
En caso de necesitar regresar a Dublín, es posible arreglar un regreso con la misma compañía o tomar un trasporte público desde Galway. Si tomaste un tour que inició en Dublín, podrás estar seguro que te llevarán de regreso hasta la calle O’Connell.
Visita guiada en autobús desde Dublín
La manera más rápida, sencilla y cómoda de hacer un recorrido por los acantilados de Moher es contratando un tour en autobús desde Dublín. La mayoría de excursiones salen desde la calle O’Connell y llegan hasta Galway, para después visitar los acantilados.
El recorrido desde Dublín hasta Galway es en sí mismo un atractivo, ya que podrás admirar la belleza del camino, la flora y fauna de la zona, pasando por Tullamore, Atlhone, Ballinasloe y las cercanías de Loughrea.
Los autobuses por lo general cuentan con servicios como conexión a Internet vía Wi-Fi, e incluso snacks, con cómodos asientos y un ambiente con temperatura controlada. El recorrido en autobús tarda solo 90 minutos.
Es perfecto para viajar acompañado, pero si se desea hacer el recorrido a solas lo disfrutarás enormemente.
Algunos tours incluyen una visita al Parque Nacional de Burren que se encuentra ubicado muy cerca de la Bahía de Bay, donde se puede hacer una parada y admirar el paisaje.
Las dos visitas que te recomendamos hacer en autobús son las siguientes:
Ruta a pie desde Dublín
Llegar caminando a los acantilados de Moher desde Dublín es algo complicado y que sólo algunas personas serían capaces, ya que la distancia entre ambas zonas es de poco más de 200 kilómetros.
Aun así, es posible, siempre y cuando se haga por tramos, es decir, caminar de una zona a otra cuya separación sea de alrededor de 40 km.
Se puede caminar haciendo paradas en las siguientes zonas: Tullamore, Atlhone, Ballinasloe y las cercanías de Loughrea.
¿Cómo llegar a los acantilados de Moher?
Tal como he explicado, para llegar a los acantilados de Moher hay muchas y muy variadas opciones, algunas más recomendables que otras.
Elegir cuál sería la mejor según tu caso particular depende enteramente de ti.
La mayoría de las opciones parten de un tour, pero si deseas hacer el recorrido por tu cuenta en un transporte particular, lo mejor es hacerlo en autobús, ya que es la forma más cómoda.
La ventaja de ir por tu cuenta es que puedes elegir el tiempo que pasarás en cada zona, ya que detenerte a ver algún paisaje o visitar alguna zona de paso es bastante recomendable.